Las órdenes de cambio son esenciales para mantener la eficiencia y la adaptabilidad en la logística, ya que permiten a las empresas ajustar las operaciones sin provocar grandes retrasos. Al implementar procesos estructurados de órdenes de cambio, las empresas pueden gestionar desafíos inesperados, mejorar el control de costos y mantener relaciones sólidas con los proveedores.
Por ejemplo, es posible que una empresa necesite modificar los planes de almacenamiento del almacén debido a las fluctuaciones estacionales del inventario. Al emitir una orden de cambio, el Proveedor de 3PL puede reasignar el espacio y los recursos de manera eficiente, garantizando un flujo de inventario fluido y evitando cuellos de botella en la cadena de suministro.