La entrada al almacén es importante porque permite a las empresas diferir los pagos de derechos, gestionar grandes envíos de manera más eficiente y controlar el flujo de caja. También brinda tiempo para clasificar, volver a empaquetar o preparar los productos antes de que ingresen al mercado nacional o se exporten. En la logística 3PL, esto ayuda a agilizar la tramitación y, al mismo tiempo, a cumplir con las normativas aduaneras.
Por ejemplo, un top 3PL el proveedor puede recibir productos electrónicos importados en un almacén aduanero con el estado de entrada al almacén. Los productos se almacenan de forma segura y sin aranceles hasta que se vendan o exporten, lo que permite al cliente gestionar los niveles de existencias y reducir los costos iniciales.