La demanda al contado se refiere a la necesidad inmediata y a corto plazo de bienes o servicios que surgen inesperadamente, lo que requiere que las empresas respondan rápidamente mediante la obtención de recursos o capacidad adicionales para satisfacer la demanda.
La demanda al contado suele caracterizarse por necesidades urgentes e impredecibles que pueden no formar parte de la planificación o previsión habituales. Este tipo de demanda a menudo conduce a precios más altos y requiere flexibilidad y rapidez en la toma de decisiones para cumplir con el pedido. Para las empresas, la gestión eficaz de la demanda puntual puede aumentar los ingresos y la satisfacción de los clientes si se gestiona de forma eficiente.
La demanda puntual funciona abordando las necesidades urgentes a corto plazo que surgen inesperadamente y que, a menudo, requieren la adquisición rápida de recursos adicionales. En el ámbito de la logística, esto podría implicar garantizar una capacidad de transporte adicional para gestionar una afluencia de envíos o tramitar un pedido urgente.
La gestión eficaz de la demanda puntual puede ayudar a su empresa a aprovechar oportunidades imprevistas, mejorar la satisfacción de los clientes e incluso generar precios superiores para los servicios urgentes, lo que aumenta su potencial de ingresos.