Externalizado almacenamiento es un activo fundamental para las empresas que buscan optimizar las operaciones y centrar los recursos en el crecimiento en lugar de en la administración del almacenamiento. Con un modelo subcontratado, las empresas evitan el costo y la molestia de administrar las operaciones de almacenamiento, como la contratación de personal, la manipulación del equipo y el mantenimiento de las instalaciones. También permite a las empresas aprovechar la red de un proveedor externo, lo que a menudo se traduce en tiempos de distribución más rápidos, un mejor servicio para los clientes finales y una gestión más eficiente de las fluctuaciones estacionales del inventario.
Por ejemplo, un comercio electrónico los minoristas con altas ventas estacionales pueden utilizar el almacenamiento subcontratado para ampliar la capacidad de almacenamiento en temporadas altas sin comprometerse a un arrendamiento de almacén a largo plazo. Este enfoque permite controlar los costos y garantiza que el minorista pueda satisfacer la creciente demanda de los clientes durante los períodos de mucho tráfico, lo que mejora tanto la satisfacción del cliente como la eficiencia operativa.