En el contexto de la logística y la gestión de la cadena de suministro, la gestión de excepciones es crucial para mantener la eficiencia y la fiabilidad. Las interrupciones, como el incumplimiento de los plazos de entrega o los problemas de inventario, pueden provocar la insatisfacción de los clientes y aumentar los costos si no se gestionan con prontitud. Un sistema proactivo de gestión de excepciones permite a las empresas identificar y abordar rápidamente estos problemas, lo que evita que se agraven y provoquen demoras o complicaciones más importantes.
Por ejemplo, un empresa de logística con un sólido sistema de gestión de excepciones, puede redirigir rápidamente un envío retrasado o reemplazar un producto dañado, garantizando que los clientes reciban sus pedidos a tiempo. Al abordar estas interrupciones con rapidez, las empresas preservan la confianza de los clientes y reducen las operaciones cuellos de botella, y evita costos adicionales, garantizando un servicio consistente y confiable.