La inversión de derechos es un tema importante para las empresas, especialmente en la industria manufacturera, porque puede distorsionar la economía de la cadena de suministro y aumentar los costos. Al encarecer la importación de materias primas que de productos acabados, la inversión arancelaria puede socavar los beneficios de la fabricación nacional en materia de ahorro de costes y complicar el cumplimiento de las normas aduaneras. En el caso de las empresas que se dedican a la logística y el almacenamiento con el sistema 3PL, abordar la inversión de los derechos ayuda a optimizar la rentabilidad, ya que garantiza que se utiliza la estrategia de importación correcta, equilibrando el coste de las materias primas y los productos acabados.
Por ejemplo, un almacén de 3PL que manipule componentes para un fabricante podría enfrentarse a aranceles más altos sobre las materias primas importadas, lo que haría que fuera más atractivo importar productos terminados. Esto podría generar ineficiencias, ya que la empresa podría terminar pagando más por los productos listos para la venta en lugar de producirlos internamente, a pesar de los posibles ahorros en la fabricación.