Las existencias intermedias desempeñan un papel crucial en la estabilidad de la cadena de suministro al evitar las interrupciones operativas causadas por las fluctuaciones de la demanda o los retrasos en los envíos. Sin él, las empresas corren el riesgo de perder ventas, dañar la confianza de los clientes y enfrentarse a un aumento de los costos debido a la reposición de existencias de emergencia o al envío acelerado.
Por ejemplo, un top 3PL el proveedor que gestiona el inventario de una marca minorista puede tener existencias de reserva para adaptarse a los picos de demanda estacionales. Si se produce un aumento repentino de los pedidos, el minorista puede tramitarlos de inmediato sin esperar a nuevos envíos, lo que garantiza la disponibilidad continua del producto y evita la pérdida de ingresos.