El Grandes Datos es crucial porque permite a las empresas tomar decisiones basadas en datos que mejoran la eficiencia, reducen los costos y aumentan la rentabilidad. En la cadena de suministro, los macrodatos permiten a las empresas monitorear los niveles de inventario, pronosticar la demanda y optimizar las operaciones logísticas, lo que lleva a una asignación de recursos más eficiente y a una mayor satisfacción de los clientes. Con la capacidad de rastrear los datos en tiempo real, las empresas pueden identificar rápidamente las ineficiencias y adaptarse a las condiciones cambiantes.
Por ejemplo, en el sector minorista, los macrodatos se utilizan para rastrear el comportamiento de los consumidores, predecir las tendencias de la demanda y gestionar los niveles de existencias con mayor precisión. Esto se traduce en una mejor gestión del inventario, menos desabastecimientos y una cadena de suministro con mayor capacidad de respuesta, lo que, en última instancia, mejora la experiencia del cliente.