La admisión es un paso crucial en el proceso logístico, ya que garantiza que las mercancías puedan entrar legalmente en un área regulada, como una zona franca o un almacén, sin incurrir inmediatamente en derechos de aduana. Esto permite a las empresas almacenar o procesar mercancías mientras aplazan los aranceles o aprovechan las exenciones especiales. Para las empresas de logística y almacenamiento de 3PL, los procesos de admisión adecuados reducen las demoras y agilizan la gestión del inventario, garantizando el cumplimiento de la normativa.
Por ejemplo, cuando una empresa importa productos a una zona franca, la admisión permite que estos productos se almacenen sin incurrir en aranceles hasta que ingresen al comercio estadounidense o se exporten, lo que optimiza el flujo de caja y reduce los costos innecesarios.